domingo, 22 de mayo de 2011

Medina Sidonia durante la guerra de la Independencia

Con este título acaba de escribirse un nuevo libro sobre la Historia de Medina Sidonia. La obra, compuesta por dos tomos, ha sido coordinada por Jesús Romero Valiente y la Asociación Puerta del Sol.
Será presentado el 1 de Julio.

miércoles, 18 de mayo de 2011

Vestigios de Asido Caesarina Augusta: Livia



El magnífico busto de Livia nos recuerda la importancia de la que fue colonia de derecho romano. Hallada en 1960, está esculpida en mármol blanco con una altura de 37 centímetros. Representa una cabeza femenina, cuyos rasgos más destacados son los grandes ojos, los anchos pómulos y la pequeña boca.

El peinado de nodus, caracterizado por el tupé alto sobre la frente, aladares de ondas laterales, banda de pelo liso sobre el cráneo y moño grueso bajo, nos hace ver que se trata de un retrato de Livia, puesto que este tipo de peinado era el propio de la dinastía Julio-Claudia.

El busto, datado en torno a los años 14 y 37 de nuestra era, responde al modelo de la época y el estilo de Tiberio, realizado de forma correcta y desenvuelta. Fue hallado en las excavaciones realizadas para la construcción de los depósitos de agua existentes en la zona del Castillo, en donde aparecieron además los bustos de Druso y Germánico, formando los tres bustos un grupo escultórico relacionado con el culto a la familia Julio-Claudia, la domus augusta.
Las cabezas irían insertadas en estatuas, adosadas a la pared, a juzgar por el estado inacabado de las partes traseras. El conjunto estaría presidido por Livia, en el centro, con Germánico a su derecha y Druso a la izquierda, conforme al orden jerárquico sucesorio. Teniendo en cuenta todo lo encontrado y puesto en valor en la zona del Castillo, sin duda la parte que ocupan los depósitos de agua habrían deparado más hallazgos, lástima que no se aplicaran los debidos controles arqueológicos.

Por último, indicar que se encuentra depositado en el Museo de Cádiz, estando actualmente disponible para exposición temporal.

martes, 10 de mayo de 2011

Conducción de los restos de Venadito y Villavicencio

Con la solemnidad de ordenanza, ayer tuvo lugar la conducción de los restos del conde del Venadito y del general Juan de Villavicencio al Panteón de Marinos Ilustres.

Los restos de ambos marinos estaban desde el día anterior en la estación de San Fernando debidamente custodiados por una guardia militar. Hasta la estación llegaron el capitán general y las distintas comisiones, encabezadas por los alcaldes de Cádiz y Medina Sidonia. La carrera estaba cubierta por la marinería de distintos buques.

Al salir de la estación la banda de música tocó la Marcha Real y se hicieron los honores de ordenanza. Los restos de ambos marinos, en armones de Artillería, fueron llevados hasta el panteón, siendo el cortejo presenciado por infinidad de personas.

Al llegar al panteón se hicieron las salvas de ordenanza y se rezó un respondo. De la entrega de los restos se levantó el acta oportuna.


Publicado en Diario de Cádiz el 10 de Mayo de 1911

viernes, 6 de mayo de 2011

Asidonenses ilustres: Miguel de la Vega-Inclán



Miguel de la Vega-Inclán y Palma nació en Medina Sidonia en 1820. Ingresó de niño en el ejército, en Caballería, por deseo de su padre, el Teniente General D. Benigno de la Vega-Inclán y Enríquez.

Intervino en su juventud en diversos conflictos y pronunciamientos militares, en especial en el pronunciamiento de Torrejón de Ardoz, que acabó con la regencia de Espartero, del cual era enemigo personal, obteniendo el ascenso a Comandante de Caballería. Tras una destacada carrera militar, ascendió a Coronel en 1853, y contrajo matrimonio con Elisa Flaquer y Ceriola. Ascendido a Brigadier, desempeñó el cargo de Gobernador Militar de Valladolid y Capitán General interino, así como el de Coronel honorífico del Regimiento de Lanceros de España.

En 1878 le fue concedido el título de Marqués de la Vega-Inclán, siendo el primero en ostentar este título nobiliario, que hoy día sigue en la figura de María Teresa Díaz-Aguado y Neyra.

Asumió el cargo de Gobernador Militar de Puerto Rico desde 1882 hasta 1884. Bajo este mandato se construyó el municipio de Lajas, gestionó la fundación de una escuela profesional en el pueblo de Carey, y la construcción de un manicomio provincial. Además, confió el establecimiento de la Escuela de Dibujo de Ponce, y autorizó a Román Baldorioty de Castro y Hemeterio Colón a instituir un colegio de segunda enseñanza también en Ponce.

En el año 1884 tuvo lugar una epidemia de fiebre amarilla en Puerto Rico. D. Miguel había sido propuesto para Ministro de la Guerra, siendo urgente su regreso a España. Pero, iniciada la epidemia, se negó a abandonar su residencia ya que, en su opinión hubiese implicado dejar su puesto de mando y a su tropa, aunque se le sugirió por la oficialidad trasladarse a un lugar seguro, en concreto a la residencia de Río Piedras, alejada de la capital y considerada como lugar seguro.

Falleció víctima de la fiebre amarilla el 31 de octubre de 1884. Enterrado en Puerto Rico, sus restos fueron repatriados a España en 1913. Entre sus condecoraciones se encontraban, sin contar las conmemorativas de campañas, la Cruz de San Fernando, la Cruz Roja al Mérito Militar y la Orden del Águila Roja de Prusia.

Su hijo Benigno heredó el título de Marqués, siendo nombrado Senador del Reino y patrono del Museo del Prado. Además, fundó el Museo Romántico y el Museo El Greco de Toledo, y fue el creador de la red de Paradores Nacionales de España.

domingo, 1 de mayo de 2011

La obra del mes: “Manifestador”



Con el ánimo de destacar el rico patrimonio de nuestra ciudad, traemos este mes una gran obra de orfebrería. Se trata de un manifestador, templete portátil donde se expone el Santísimo Sacramento a la adoración de los fieles, como ocurre en la noche del Jueves Santo.

Ejecutado a fines del siglo XVIII, está realizado sobre madera revestido de terciopelo rojo y plata repujada procedente de México. De gran tamaño, algo más de dos metros, está formado por tres partes. La primera corresponde a la peana, amplia y repujada con motivos geométricos y florales.
La parte central, de mayor altura que las demás, se trata del manifestador propiamente dicho, con una elaborada base con cabezas de ángeles sobre la cual se asentaría la Custodia con el Viril. Tiene como fondo un Astro Sol rodeado de estrellas y motivos florales y coronado por una cruz. A las esquinas, cabeza de ángeles, todo ello enmarcado. Los motivos vegetales se repiten a los lados del marco anteriormente descrito, junto con dos relieves de San Pedro y San Pablo. Todo ello está realizado en plata repujada y terciopelo. A ambos lados de esta parte central, a modo de tríptico, se perfilan dos puertas trabajadas en plata, con motivos que recuerdan la Eucaristía (racimos de uva y trigo).
Cierra esta pieza de orfebrería una corona de plata repujada.





Esta magnífica obra, de la que no encontramos otra igual en la provincia, fue donada a la parroquia Matriz de Santa María en 1796 por Beatriz Montes de Oca y Novela, viuda de Antonio de Figueroa Laso de la Vega, quien también restauró la iglesia del Hospital del Amor de Dios. Su familia está emparentada con personajes que ocuparon cargos administrativos en América Latina.

Podemos admirarlo en el Museo de Arte Sacro de la Iglesia de Santa María la Mayor la Coronada.

La obra del mes: Esperanza

  Dice que la esperanza es lo último que se pierde. Traemos esta entrada con una de las representaciones de las virtudes teologales que se e...