sábado, 23 de junio de 2012

Obra de Juan Simón Gutiérrez (III)


Otra de las obras recientemente atribuida al pintor asidonense Juan Simón Gutiérrez, al igual que Niño Jesús de la espina, es la que traemos a esta entrada.

Se trata del lienzo La Virgen niña hilando. Al igual que la anteriormente comentada, está depositada por el Museo del Prado en el Ministerio del Ejército de Madrid, y ha sido anteriormente atribuida al pintor Pedro Núñez de Villavicencio.

La Virgen, sentada e hilando con rueca y huso, viste rico ropaje a la usanza de la época, con un ligero tocado y hermoso corpiño rojo. Al fondo, aparece un rompimiento de gloria que rodea la figura de la Virgen, formado por cabezas de ángeles.

Iconográficamente, se inspira en los evangelios apócrifos. En el Protoevangelio de Santiago se narra cómo los sacerdotes del templo de Jerusalen encargaron a la Virgen niña hacer el velo del templo, premonizando la Pasión de Cristo al desgarrarse dicho velo cuando murió Jesús. El Evangelio del Pseudo-Mateo recoge la maestría que tenía la Virgen en su juventud con las labores de lana.

jueves, 14 de junio de 2012

Traslado de la Virgen Milagrosa

A las cuatro de la tarde del pasado día 7 de los corrientes, fue trasladada procesionalmente desde la finca "El Santísimo", donde fue llevada como medida de precaución al iniciarse el glorioso movimiento nacional salvador de España, al Convento de San Agustín, la venerada imagen de María Milagrosa.
Numerosos fieles acompañaron a la Santísima Virgen en este solemne acto, que fue presidido por las autoridades locales.
Daban escolta a la imagen una sección del Batallón de Milicias Cívicas de esta ciudad.


Publicado en Nueva Aurora. Revista semanal, el día 18 de octubre de 1936.

miércoles, 6 de junio de 2012

La obra del mes: "Custodia procesional".




La presente Custodia procesional está formada por dos piezas: el Expositor y el Templete sobre en el que está dicho expositor.

Ha sido tenido como certeza una única autoría de las piezas, asumiéndose que era obra del sevillano Juan Tercero, pero ahora es sabido que fue ayudado en algunas partes por el platero cordobés Francisco de Alfaro, creador de las custodias procesionales de Marchena, Écija o Carmona.

La pieza de orfebrería fue encargada el 10 de marzo de 1565 por Gutierre Pérez, mayordomo de la Iglesia de Santa María, a Juan Tercero, debiendo hacer el baldaquino eucarístico de planta cuadrada y la custodia sobredorada. Se usó para su realización 17 kilos de plata, y fue sufragado en parte con la herencia que dejó el antiguo mayordomo de la parroquia, Francisco Ximénez Delgado.

Lo primero que hace el platero sevillano son las andas, labradas al romano, con 4 columnas torneadas y con dinteles en el baldaquino, en lugar de arcos. El ostensorio, de conseguida proporción con el templete, reproduce en plata sobredorada el modelo clásico del plateresco: custodia con forma de torre y con pie torneado, muy conseguido. Tiene el basamento cuadrilobulado y el astil torneado, con sierpes labradas sesgando de forma vertical la manzana cilíndrica.

Por protocolos en la entrega del dinero (en el que hubo retrasos) así como por la enfermedad que sufrió Juan Tercero, hace que intervenga en algunas partes del encargo Francisco de Alfaro.

Así, se puede intuir que los cuatro balaustres sobre los altos plintos, los dinteles (que están labrados con adornos de grutescos y candelieri platerescos) y la cubierta a cuatro aguas, son del estilo de Tercero. La peana, con costillas con tornapuntos aéreas, o los óvalos y cartelas de cuero, o también el remate del templete con la escultura de la Fe, serían del cordobés Alfaro.

No fueron cumplidos las fechas acordadas, por retrasos en el pago, entregándose el conjunto por partes, teniéndoseel total completo en el año 1575.

Actualmente se encuentra en la antesacristía de la Iglesia de Santa María la Mayor la Coronada, desde donde procesiona todos los años en la festividad del Corpus Christi.

La obra del mes: Esperanza

  Dice que la esperanza es lo último que se pierde. Traemos esta entrada con una de las representaciones de las virtudes teologales que se e...