Sobre libros (III)

Escrito por el arquitecto Carlos García de Paredes, a la sazón también ermitaño que se encarga de su cuidado, el libro Ermita de los Santos Mártires es un gran estudio de 296 páginas sobre este templo visigodo, que pasa por ser la ermita más antigua de España en activo.

Se refleja, aparte de un estudio histórico sobre la orden Agustina en Medina Sidonia y sobre la fundación de la ermita en tiempos de san Paulino de Nola, un análisis de planimetría y de los elementos muebles e inmuebles del edificio.

Reabre san Juan de Dios

Después de dos años permaneciendo cerrada al culto por problemas en la techumbre, que ya habían sido avisados hace tiempo, reabre de nuevo mañana la iglesia de san Juan de Dios.

Tras varias campañas para recaudar dinero se ha podido reformar el techo del templo, cambiándose la estructura y las tejas, y procediéndose además al resanado y blanqueo de las fachadas y del interior del edificio. Esperemos que con el tiempo se opte por un correcto mantenimiento de la iglesia, que evitaría graves problemas como los que ha estado sufriendo estos años atrás.

Esta noticia nos deja un sabor agridulce. Si bien nos alegramos de que se recupere este patrimonio, no podemos olvidad el templo de la Victoria, que el mes que viene cumplirá tres años cerrado por problemas también en la techumbre. En un principio los problemas no eran tan graves como lo son ahora, en el que el cierre, con la consabida falta de mantenimiento, ha agravado sus patologías, haciéndose más necesaria la intervención. Y más costosa económicamente.

Como sabemos, con el acuerdo de cesión de san Agustín rubricado por el Ayuntamiento y el Obispado, se firmó también la obra de rehabilitación del que fuera anteriormente convento de la Victoria. La corporación ya ha abonado la partida económica, por lo que todo depende del Obispado, quien ni muestra demasiada celeridad ni tiene constancia de que a más tiempo de demora mayor será el incremento en la obra.

Nos viene a la mente las palabras del delegado de patrimonio del Obispado cuando se procedió al cierre de san Juan de Dios (de donde era además párroco) aclarando que, si bien la Victoria tiene gran importancia desde el punto de vista del Patrimonio, no la tiene desde lo evangelizador, al ser iglesia y no parroquia, como lo es san Juan de Dios. Por este silogismo, explicaba que era prioritario mantener el antiguo convento hospitalario antes que el de los Mínimos. Su teoría parece ser que se ha cumplido, acabando ahora la obra de rehabilitación con la reapertura del templo mañana. Esperemos que no se olvide del otro templo, el que sólo tiene valor patrimonial. Pero qué valor. No podemos consentir perder otro templo más.

Sobre préstamos, usos y beneplácitos

Fuente: http://denazaretasevilla.com

 

 

El pasado mes de diciembre se celebró el tradicional besamanos a la Virgen de la Esperanza de Triana con una duración de seis días. En el exorno, además de la talla y candelabros, se colocó parte del manifestador que posee la iglesia de Santa María la Mayor de Medina Sidonia.

 

 

Este hecho, poco conocido, nos provoca cierto asombro por varias cosas. En primer lugar por el conocimiento del patrimonio asidonense que tiene la hermandad trianera, máxime cuando dicho manifestador (obra ecléctica realizada con plata mexicana) se encuentra en el Museo de Arte Sacro del mismo templo, museo que lleva cerrado varios años y del que no podemos admirar parte de las piezas que alberga (obras de Martínez Montañés, Roque Bolduque...), mientras que otras han sido sacadas y recolocadas por varios lugares.

 

No sabemos hasta qué punto se solicitó permiso para su traslado y disfrute de los sevillanos y visitantes. Creemos que con buena fe se realizaría todo, y eso que fue un mes antes de la circular mandada a los párrocos de la Diócesis sobre el proceder con las obras patrimoniales, en la que hace referencia a los casos de "enajenación, cesión, traslado, exposición y préstamo de imágenes o enseres", lo cual debe hacerse previa consulta a Patrimonio y aportando siempre la solicitud del interesado, el informe del párroco o director espiritual y una justificación de los motivos para esa actuación, más aún cuando afectan a aquellos bienes que estén protegidos o catalogados como de interés cultural (recordemos que el templo de Santa María tiene la catalogación de BIC).

 

Nos llama también la atención las partes del manifestador que fueron trasladadas a Sevilla (deseamos que de modo correcto). Decimos partes, porque según las imágenes aparecen el panel con los frisos, la corona y el dosel y el pedestal, sin que aparezcan las puertas que el manifestador posee (¿dónde estaban?, ¿se retiraron debidamente sin dañar el terciopelo o la plata?).

 

Así pues, nos alegramos que los sevillanos y visitantes (muchos de ellos asidonenses, puesto que hubo excursiones al besamanos) pudieran contemplar lo que normalmente no se puede ver en el templo por permanecer cerrado o con difícil acceso, como se podría haber hecho, por ejemplo, las pasadas Jornadas de Puertas Abiertas, días antes del besamanos trianero.

Presencia de Medina Sidonia en el Arqueológico Nacional (III)

Llega la expansión musulmana por la península a través del Estrecho. Aparece Madina Sidonia en una de las dos rutas que parten desde Al-Yazirat (Algeciras), y que continua hacia Kadis, Saris e Isbiliya (Cádiz, Jerez y Sevilla) en dirección a Marida (Mérida) y el norte por la Vía de la Plata.

San Pedro

Siguiendo el mismo modelo que los anteriores lienzos (forma rectangular con marco dorado y de mediados del XVII), la pintura que sigue en el análisis del retablo mayor de Santiago recoge la imagen del apóstol san Pedro.

De edad mayor, tal y como delatan sus barbas canas y su poco pelo envejecido, el discípulo aparece representado tal y como manda su iconografía, a saber: portando en cada mano por un lado un libro y por otro la característica llave (en referencia a las llaves del cielo que le entregó Jesucristo cuando le reconoció la supremacía de entre los apóstoles).

Viste una túnica azul verdoso y se cubre de un manto marrón claro. De bella factura y resuelto escorzo, es una de las mejores imágenes del retablo que comentamos.

Premio para un poeta asidonense

El escritor asidonense y asentado en Valencia Antonio Cabrera ha ganado el XXII Premio Bodegas Olarra & Café Bretón, dotado con 6.000 euros, con la obra "Habla el callado".

El jurado se ha reunido hoy en Logroño, tras lo que ha dado a conocer el fallo de los ganadores, que incluye la publicación de la obra premiada en la editorial Pepitas de Calabaza, ha detallado la organización en una nota.

Antonio Cabrera (Medina Sidonia, Cádiz, 1958), quien recibirá el premio en la capital riojana el próximo mes de abril, trabaja como profesor de Filosofía en un Instituto de Enseñanza Secundaria en la localidad de Sagunto.

Es autor de los libros de poemas "En la estación perpetua" (Visor, 2000), ganador del XII Premio Internacional de Poesía Fundación Loewe y Premio Nacional de la Crítica 2001; "Con el aire" (Visor, 2004), galardonado con el XXV Premio Ciudad de Melilla y Premio de la Crítica Valenciana 2005; y "Piedras al agua" (Tusquets, 2010).

Entre los dos primeros poemarios, publicó su colección de haikus de tema ornitológico "Tierra en el cielo" (Pre-Textos, 2001) y el año pasado vio la luz su antología "Montaña al sudoeste" (Renacimiento, 2014).

Como antólogo, es responsable de la edición de "Cimas y abismos" (Renacimiento, 2012), de José Luis Parra; y la previsión es que el próximo mes de abril publique un nuevo libro de poemas.
Ha vertido al castellano los volúmenes "Poesía y ontología", de Gianni Vattimo (Universitat de València, 1993); "Los pájaros amigos", de Josep Maria de Sagarra (Pre-Textos, 2003); y "Sobre el lamento de Jasón", de Vicent Alonso (Denes, 2008).

También es autor del volumen de prosas "El minuto y el año" (La Palma, 2008); ha colaborado en los diarios El País, ABC y Levante-EMV; y ha publicado artículos en publicaciones como Clarín, El maquinista de la Generación, Litoral y Lateral.

Entrada para los toros

Traemos esta entrada para una corrida de toros en la plaza de toros de Medina Sidonia, hoy inexistente. Se corresponde, como podemos ver, para una corrida celebrada el 5 de junio de 1971.

Cumplimos 6 años

Seis son ya los años desde que iniciamos este blog, que pretende humildemente acercar el inmenso Patrimonio de Medina Sidonia, recogiendo el Arte, la Historia, los eventos... en definitiva la Cultura de esta ciudad trimilenaria.

Gracias a todos los lectores, a los que comentan, a los que comparten. Y gracias sobre todo a los que me alientan a seguir y apoyan. Esperemos que De Assido y otros ecos siga más años. No será por historias que compartir: Medina Sidonia tiene entradas en el blog para muchos años más.

A seguir.

La obra del mes: Azulejos holandeses

Un hermoso paño con un total de 60 azulejos decora parte del presbiterio de la iglesia de la Victoria. Son azulejos realizados en Delf, con medidas cuadrangulares de 13x13cm. y están datados a principios del siglo XVIII.
El color es monocromático, de color azul, aunque algunos de ellos presentan contornos pintados en malva y los detalles en azul. El borde colorido con motivos florales es de azulejo sevillano.

Las escenas representadas son episodios bíblicos, pastoriles, paisajes, escenas cotidianas y escenas cortesanas. Algunos de los motivos se repiten, y otros son únicos. La pequeña representación que traemos a esta entrada recoge varias de estas escenas.
En la primera foto, que está localizada en la zona de la epístola, se muestran las siguientes escenas. En la fila de arriba encontramos una escena de patinadores sobre hielo, una de campo con pastores y rebaño, otro azulejo de un embarcadero y una última sobre una carga de vasijas en barca. En la fila de abajo se representa un paseo de caballos, el exterior de una casa, un cortejo de pastores y la escena bíblica de Jacob y Raquel.

En esta segunda foto, sita en una columna en el lado del Evangelio, aparecen otras temáticas. En la fila de arriba aparecen las escenas bíblicas de Judit y Holofernes y de Balaam y la burra. Otra escena recoge una barca atracando. Abajo se representa el buen samaritano, una escena de un hombre sacando agua del pozo y la escena del Nuevo Testamento donde aparecen unas mujeres ante el sepulcro vacío.

Con respecto al estado de conservación, debemos decir que es pésimo, con suciedad y rotura de partes. Poco es aprecio que se ha tenido por esta artesanía. Esperemos que puedan ser recuperados pronto. Aunque lo que de verdad esperamos es que podamos contemplarlo, aunque sea con el deplorable estado de conservación, puesto que en la actualidad el templo permanece cerrado.